Diviértete jugando a los mejores juegos de cartas online. Juega al clásico Blackjack y no pases de 21, ¡o prueba muchos otros juegos!
¿Sabías que el blackjack ya era popular en la época del Quijote, y que Andar Bahar es uno de los juegos de cartas más antiguos, originado hace más de mil años en India? ¿O que el bacará es el juego favorito de James Bond? Aquí podrás aprender todo lo que necesitas saber sobre los juegos de cartas más populares y que puedes encontrar en el casino online. Conoce todas las curiosidades, reglas y consejos necesarios para convertirte en un maestro de las cartas y sacar el mejor provecho a tus apuestas.
También conocido como veintiuno, en blackjack el objetivo del juego es acercarse lo máximo posible a 21 para ganar. Su primera referencia aparece en la obra de Cervantes “Rinconete y Cortadillo”, donde se describe a dos personajes jugando a la “veintiuna”, por lo que se sabe que ya era popular en el siglo XVII. Pero su máxima popularidad llegó en el siglo XIX cuando se hizo famoso en los casinos estadounidenses, donde adquirió el nombre por el que lo conocemos hoy en día gracias a un nuevo tipo de apuesta especial: el “blackjack”, que consistía en ganar diez veces lo apostado con solo dos cartas, una J (Jack) y un trébol o picas negro (black).
Hoy en día continúa siendo uno de los juegos de cartas más famosos a nivel mundial, probablemente por su sencillez, pero sin dejar de ser necesario desarrollar estrategias de juego para ganar y no dejarlo todo solamente al azar. Por esto, es importante conocer muy bien sus reglas y estrategias para mejorar las posibilidades de ganar.
El objetivo del blackjack o veintiuno, es lograr sumar 21 o al menos acercarse lo máximo posible, pero sin pasarse. En las mesas de casino, uno o varios jugadores competirán contra el crupier o dealer, que representa a la banca, y ganará el que logre llegar a la mejor puntuación. Se puede jugar en una mesa con capacidad de hasta 4 o 7 jugadores, aunque es importante saber que cada jugador juega únicamente contra la banca, debiendo conseguir una puntuación mejor que el crupier.
Al comienzo del juego, cada jugador dispondrá de un casillero para realizar su apuesta inicial antes de recibir las cartas. Debes tener en cuenta que la mayoría de las mesas tienen una apuesta mínima y una máxima para poder jugar. Al finalizar el juego, se pagarán las apuestas según el valor de lo apostado: Si ganas a la banca, la apuesta se paga 1 a 1, por lo que recibirás el doble de los apostado; si hay empate, recuperas lo apostado; pero si gana la banca, perderás tu apuesta. Solamente logrando blackjack la apuesta se paga 3 a 2. Tendrás un blackjack en tu mano cuando sumes 21 solo con dos cartas: un As y otra carta con valor 10.
Luego de realizar las apuestas, el crupier repartirá 2 cartas a cada jugador. Según la versión del juego, la banca también recibirá 1 o 2 cartas, pero siempre dejará una de ellas visible para todos los jugadores. Existe la posibilidad de que la banca tenga un blackjack al inicio de la partida. Por esto, si la carta mostrada es un As (cuyo valor puede ser igual a 11), de manera excepcional el crupier descubrirá su segunda carta y, si esta tiene un valor igual a 10, ganará automáticamente el juego. La única posibilidad para el jugador en este caso, es haber recibido en su mano otro blackjack, con lo que se llegaría a un empate.
Si la carta revelada por el crupier no es un As o no llega a sumar blackjack en la primera mano, es que comienza verdaderamente el turno de los jugadores, en el mismo orden en que se repartieron las cartas. Según el valor de su mano, cada jugador tiene dos opciones: solicitar una nueva carta o plantarse. Puedes pedir cartas tantas veces como quieras hasta alcanzar el máximo valor posible, pero debes tener en cuenta que no puedes pasarte de 21: si lo haces, perderás automáticamente la partida.
Finalizado el turno de los jugadores, si aún quedan jugadores activos comenzará el turno de la banca. Según la versión del juego, el crupier revelará su segunda carta oculta o pedirá nueva carta. Al contrario del jugador, la banca siempre está obligada a realizar los mismos movimientos: si la mano de la banca suma 16 puntos o menos, estará obligada a seguir pidiendo cartas; si su mano suma entre 17 y 21 puntos, estará obligada a plantarse. Por el contrario, si se pasa de 21, perderá automáticamente. Tras el turno de la banca, finaliza la partida. Según los resultados de cada jugador (si han ganado, empatado, o perdido contra la banca) se pagarán sus apuestas.
En general, el blackjack se juega con una o dos bajaras de 52 cartas sin los comodines. Es muy importante tener en cuenta el valor de cada carta para calcular el valor de tu mano:
La única forma de lograr un blackjack, que es la apuesta que se paga más alta, es sumar 21 con solamente 2 cartas: un As y cualquier otra carta con valor 10.
Durante la partida, existen ciertas situaciones que te permitirán realizar algunas apuestas especiales:
En blackjack, algunas situaciones son más evidentes que otras. Por ejemplo, si en tus primeras dos cartas sumas 11 o menos, es evidente que deberás pedir nueva carta, dado que será imposible que sobrepases 21. De igual manera, si en tus primeras dos cartas sumas 17 o más pero sin ases, lo más lógico sería plantarte, ya que es muy probable que tengas la puntuación más alta y, además, en caso de pedir nueva carta hay al menos un 70% de probabilidades de que sumes más de 21.
Sin embargo, existen varias situaciones intermedias donde no es tan evidente saber cuál debe ser el próximo movimiento. Aquí entran en juego dos factores: saber si tienes una “mano dura” (cuando no tienes ases en tu mano) o una “mano blanda” (cuando sí tienes ases), y comparar tus posibilidades contra las del crupier en base a su carta visible.
Con una mano blanda, siempre es aconsejable pedir nueva carta, ya que cualquier combinación con un As puede sumar 11 o menos. Por ejemplo, una combinación de un As y un 8, puede sumar 19 (11+8) o 9 (1+8).
Sin embargo, si tienes una mano dura, debes tener en cuenta que sumando al menos 12 puntos ya tienes un 31% de probabilidades de pasarte de 21 al pedir una nueva carta. Por lo tanto, debes analizar muy bien tus posibilidades con respecto a las de la banca. Por ejemplo, si tu mano suma 16 y el crupier tiene una carta baja de entre 2 y 6, como está obligado a seguir pidiendo cartas hasta llegar a 17, es muy probable que tenga que pedir al menos 2 veces cartas, lo que aumenta las probabilidades de que termine sumando más de 21 y pierda. Por lo tanto, plantándote con 16 puntos podrías igualmente a ganarle a la banca. Sin embargo, si pides nueva carta, hay más del 50% de probabilidades de que seas tú quien sobrepases 21. Por el contrario, si tu mano suma 16 y el crupier descubre una carta alta (como un 9), hay grandes posibilidades de que con su próxima carta alcance al menos 17 puntos y pueda plantarse, por lo que es más conveniente pedir una nueva carta y tratar de lograr una mejor puntuación para ganarle a la banca.
Toma nota de estos consejos básicos y mejora tus posibilidades de ganar en el blackjack:
El bacará, bacarrá o baccarat es un juego de cartas de origen francés, que ganó especial popularidad gracias a las novelas del agente 007 de Ian Fleming, al ser descrito como el juego favorito de James Bond. Su popularidad se debe a su parecido con el blackjack, pero siendo aún más sencillo de jugar.
Similar al blackjack, el objetivo del bacará es llegar al número 9 o al menos acercarse lo máximo posible. Sin embargo, la diferencia fundamental es que nunca es posible pasarse de 9: en el caso de que una mano sume un valor mayor (por ejemplo un 6 y un 7, que suman 14), el valor final de la mano pasará a ser el último dígito de la suma de las dos cartas (en el caso del ejemplo, el valor de la mano será de 4).
En una mesa de casino pueden participar hasta 14 jugadores dependiendo del juego, aunque cada jugador juega solamente contra la banca, a quien debe vencer. Se juega aproximadamente con tres o 6 mazos de 52 cartas sin comodines. El valor de cada carta es el siguiente:
Al inicio del juego, se reparten dos cartas a cada jugador y dos cartas a la banca. Si se llega a dar el caso de que alguno de los jugadores o la banca tenga una mano de 8 o 9, se considera una victoria natural, por lo que no se reparten más cartas y se define el ganador de la ronda.
En el caso de que no se dé una victoria natural, el crupier deberá repartir la tercera carta. Que el jugador o la banca reciban una tercera carta, depende de la suma total del valor de sus manos.
Reglas para el jugador:
Reglas para la Banca:
Al final, ganará el jugador o la banca según tengan la mano con un valor más próximo a 9, o empatarán en caso de obtener la misma puntuación.
Al inicio de la partida, el jugador deberá decidir entre 3 posibles apuestas:
Lo más seguro y recomendable es apostar por la banca o por el jugador. Sin embargo, debes tener en cuenta que, aunque el pago por las apuestas es el mismo, las probabilidades de que gane uno u otro no son iguales. En general, el jugador tiene un 44.62% de posibilidades de ganar, mientras que las posibilidades de la banca ascienden al 45.85%.
Por lo tanto, resulta más tentador apostar por la banca. Sin embargo, debes también tener en cuenta dos cuestiones: 1) apostar por la banca requiere pagar una comisión del 5%, por lo que finalmente la apuesta se paga 0.95 a 1; 2) aunque las probabilidades de la banca sean mayores en cada partida, a largo plazo es muy poco probable que todas las victorias se repitan siempre del lado de la banca, por lo que es recomendable alternar las apuestas.
Muchos juegos han llegado a nuestros días desde la antígua India, pero sin dudas uno de los juegos de cartas más populares es el Andar Bahar. Este juego, originado hace más de mil años en el sur de India, debe su nombre a los dos tipos de apuesta que puede hacer el jugador: Andar, si considera que el montón ganador será el que se encuentra más cerca del crupier en la parte interior, o Bahar, si considera que ganará el montón exterior. Se trata de uno de los juegos de cartas donde más interviene el azar, ya que el jugador tiene 50/50 de probabilidades de acertar en uno de los dos. Aunque probablemente sea uno de los juegos de cartas más sencillos y dinámicos de jugar, es importante que conozcas muy bien sus reglas para hacer tus mejores apuestas.
El objetivo del juego es muy sencillo: predecir en qué montón (Andar o Bahar) aparecerá la carta ganadora, que será aquella carta cuyo valor sea igual al de la carta comodín.
Lo primero que deben hacer los jugadores, es establecer sus apuestas. Solo hay dos posibilidades: elegir si la carta ganadora será descubierta en el lado de Andar o en el lado de Bahar. Las cartas se reparten una a una alternando cada montón, pero dado que siempre se coloca la primera carta en Andar, este es el que tiene más probabilidades de ser el ganador. Por lo tanto, las apuestas se pagan de la siguiente forma:
Una vez que los jugadores elijan sus apuestas, el crupier descubrirá una carta a parte entre las apuestas de Andar y Bahar, que se denomina comodín o carta de juego. Esta carta determinará la carta ganadora, que deberá ser igual al comodín. A continuación, comenzará a repartir una carta en cada lado, comenzando por Andar, hasta que aparezca la carta ganadora en uno de ellos.
Es importante saber que, además de apostar por Andar o Bahar, existen otras apuestas laterales o paralelas que el jugador también puede realizar antes de comenzar a repartir las cartas:
Dragon Tiger es uno de los juegos de casino más populares en Asia, probablemente originario de Camboya, que hoy en día se ha hecho popular a nivel mundial gracias a la sencillez de sus apuestas. Similar al Andar Bahar, el juego consiste en predecir si la carta ganadora aparecerá del lado del Dragon o del lado de Tiger, por lo que se trata de un juego puramente de azar. Solo que, en este caso, no existe la carta comodín: ganará automáticamente la carta más alta entre ambas, por lo que solo se juega con dos cartas en cada partida.
Lo primero que deben hacer los jugadores es hacer sus apuestas. Pueden apostar por Dragon (carta izquierda del jugador) o Tiger (carta derecha). Como existe la posibilidad de que ambas cartas sean iguales, también se permite apostar por el empate (o “tie”).
A continuación, el crupier colocará una carta en Dragon y otra en Tiger, que descubrirá a la vez: la carta más alta será la ganadora y se pagarán las apuestas acertadas. Ten en cuenta que, si apuestas por Dragon o Tiger y el resultado termina en empate, recuperarás solo la mitad de tu apuesta.
El valor de las cartas sigue la distribución clásica de la baraja, por lo que, ordenadas de menor a mayor valor, son:
As (1), 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10, J (11), Q (12) y K (13).
Existen 4 tipos de apuestas entre las cuales puede elegir el jugador: Dragon, Tiger, Tie y Suited Tie. A continuación, se explican cada una de ellas:
Pero, además, algunos juegos de Dragon Tiger también permiten realizar apuestas laterales o paralelas. Estas son:
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